El Gobierno del Reino Unido Además, las naciones descentralizadas han confirmado, tras una consulta celebrada a principios de este año, que se añadirá ácido fólico a la harina de trigo no integral en todo el Reino Unido para ayudar a prevenir enfermedades de la columna vertebral que pueden poner en peligro la vida de los bebés. La adición de ácido fólico significará que los alimentos elaborados con harina, como el pan, ayudarán activamente a evitar alrededor de 200 defectos del tubo neural cada año, alrededor de 20% del total anual del Reino Unido.
La harina no integral ya es un vehículo establecido para la fortificación en el Reino Unido y se espera que los costos de fortificación para la industria sean mínimos. La adición de ácido fólico a los alimentos ha sido una política de salud pública exitosa en varios países del mundo, como Australia, Nueva Zelanda y Canadá, lo que ha dado como resultado una disminución de los defectos del tubo neural.
Los funcionarios del Departamento de Medio Ambiente, el Departamento de Salud y Asistencia Social, la Agencia de Normas Alimentarias y la Oficina de Normas Alimentarias de Escocia están llevando a cabo una revisión en cuatro países de las Normas sobre el pan y la harina del Reino Unido. La aplicación de la decisión del Reino Unido sobre la fortificación obligatoria de la harina con ácido fólico se incluirá en esta revisión.
Las harinas integrales y los alimentos sin gluten no estarán sujetos a fortificación obligatoria y estos productos no están dentro del alcance inicial de la nueva política.
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