La Unión Europea (UE) está considerando una legislación de gran alcance sobre inteligencia artificial (IA), conocida como Ley de Inteligencia Artificial, y tiene como objetivo clasificar los sistemas de IA por riesgo y establecer diversos requisitos de desarrollo y uso.
La Ley busca promover la adopción de inteligencia artificial confiable y centrada en el ser humano y garantizar un alto nivel de protección de la salud, la seguridad, los derechos fundamentales, la democracia y el estado de derecho, y el medio ambiente contra efectos nocivos.
La prioridad del Parlamento Europeo es garantizar que los sistemas de IA utilizados en la UE sean seguros, transparentes, trazables, no discriminatorios y respetuosos con el medio ambiente. También quieren establecer una definición de IA uniforme y tecnológicamente neutra que pueda aplicarse a los sistemas de IA futuros.